No es necesario estar pasando por un mal momento económico para replantearse cómo se maneja el dinerotanto del punto de vista del pago de deudascomo del ahorro y la inversión. ordenar las cuentas y pensar en la mejor manera de alcanzar los objetivos requiere de un esfuerzo extra, pero aplicando ciertos estrategias financieras se hace mas llevadero y sencillo.
Como primer paso, los expertos recomiendan hacer una lista de los puntos que se desean mejorar o comenzar a incorporar a la vida financiera. Y luego ir adoptando los hábitos necesarios para poder cumplir con esas metas.
Al mismo tiempo sera importante evitar caer en errores comunes al tomar deudasa veces necesarias y que en general, son las que terminan complicando la economía personal.
Las 3 estrategias para poner en orden las finanzas
1. Definir los objetivos financieros y elaborar un presupuesto
En primer lugar es muy importante conocer la situación personal por la que se está atravesando para, desde allí, planificar a futuro: tener en cierto cuáles son las deudas, cuánto uno gasta en el día a día y definir qué es lo que realmente se necesita y qué no.
La planificación financiera es una herramienta muy importante, que junto con la fijacion de objetivos ciertos asegura una economía bajo control, aún en momentos donde surjan imprevistos.
En ese sentido, la fundadora de GT Educación Financiera y docente en InvertirOnline, gabriela totaro sostuvo un Clarín que el armado de “un presupuesto es el principal medio para que las finanzas personales tengan un orden. Si uno no sabe cuanto ingresa y cuanto gasta se hace muy difícil poder llevar a cabo un control saludable, y entender por dónde se va a el dinero”.
Totaro, explicó que “al principio, el armado del presupuesto Debería ser diario, para poder tomar rápidamente el control de las finanzas. Y repetirlo durante 21 días, porque en ese lapso se irá convirtiendo en un hábito y luego se podrá sostener en el tiempo”.
Luego, detallo que el presupuesto puede convertirse en mensual y, una vez que sea dominado, se podrá comenzar a planificar en función de si las metas son a corto, mediano o largo plazo.
En tanto, habra que escribir en un papel características son los objetivos y cómo lograrlos según la situación actual. En el corto plazo, evitar gastos y consumos necesarios, y en el largo plazo, apostar a inversiones sin buscar resultados rápidos.
2. Crear metas de ahorro
“Para empezar a ahorrar lo primero que hay que hacer es cambiar la perspectiva de lo que es el ahorrono es un proceso fácil pero cuando uno comienza a hacerlo estará mucho más aliviado emocionalmente, transitando el camino de la libertad financiera”, indicaron los especialistas de Defende.mela plataforma argentina legaltech, donde aconsejan sobre cómo manejar las finanzas.
Ese cambio de esencia, según explicaron, nació de la idea de que el ahorro tiene que formar parte de la vidacomo si fuera un gasto obligatorio más, es decir, de la misma manera que uno destina un porcentaje a pagar las cuentas y alimentos, otro porcentaje no obstante tiene que ser para el ahorro, como si la salud dependiera de eso.
El El crecimiento económico se logró con “capacidad de ahorro”, y aunque no es necesario eliminar todos los placeres, habrá que reducirlos. Cuando dentro de la planificación de los gastos de cada mes se destina un porcentaje al ahorro, naturalmente uno se termina adaptando a subsistir sin ese dinero y con el correr del tiempo va a tener los fondos suficientes para comenzar a invertir.
3. Invertir, pero solo lo que se está dispuesto a perder
Junto al ahorro, aparece la opción de invertir el dinero en la bolsa de valores para que no pierda valor frente a la inflacionuna amenaza constante para los pesos en nuestro país, ya las tasas de interes poco atractivas que ofrecen los bancos.
No obstante, los expertos en finanzas personales aconsejan invertir los ahorros en activos que realmente uno entienda y con un monto que este dispuesto a perder. La otra recomendación es arrancar un poco y diversificar las inversiones para evitar una pérdida total cuando un activo se desploma.
Bastará con ser prudente e informarse sobre el tema para aprovechar esta alternativa con la que se obtenga ganancia e impida que el dinero ahorrado se desvalorice.
Las diferentes metas justificarán diferentes estrategias y horizontes de tiempo. Por ejemplo, si el objetivo es ahorrar lo suficiente para el anticipo de una casa, probablemente habrá mucho menos tiempo que si se estuviera ahorrando para la jubilación. Tampoco es lo mismo querer saldar una deuda que tiene un plazo determinado que ganarle a la inflación a fin de año.
¿Cuál es el error más común que hay que evitar que pueda arruinar las finanzas personales?
Aunque parezca obvio que un crédito es un préstamo que tenemos que devolver (con intereses), muchas veces se produce una trampa psicologica Alabama usar la tarjeta sin pensar que el dinero no es nuestro.
Las tarjetas de credito son herramientas muy útiles para financiar gastos y compras pero hay prácticas muy comunes que pueden terminar arruinando la economía personal y traer muchos dolores de cabeza. El sobreendeudamiento y los costos necesarios son los principales problemas en los que suelen caer los usuarios que hacen un uso descontrolado del plástico.
Si bien la tarjeta de crédito puede servir para adquirir productos o afrontar gastos para los cuales los ingresos resulten insuficientes, uno no debería olvidar que, cada vez que se usa, se está descubriendo una que luego habrá deber que afrontar. Como todo, la clave es usarla en su justa medida, sin excederse.
entre los errores mas comunes que se comen al utilizar el plastico se destacan:
. Tener muchas tarjetas de credito: si se quiere tener más flexibilidad y recompensas a través de puntos y descuentos, resultará más conveniente que lo que una sola tarjeta puede ofrecer. Pero antes de decidir una cantidad, habrá que tener en cuenta cómo se manejará el peso de la deuda y las necesidades del estilo de vida de cada uno.
¿De qué manera? Habrá que multiplicar varias veces los costos de mantenimiento y renovación. Además, se hace difícil llevar a cabo un control de lo que se gasta y lo que se tiene que pagar cada mes porque está todo disperso.
. Comprar algo solo porque tiene descuento o tiene financiación: las promociones y los beneficios con las tarjetas de crédito suelen resultar muy atractivos para los consumidores. Pero las compras por impulso son las que más se desaconsejan hacer.
La tarjeta de crédito debería estar para comprar algo que se necesite realmente. Los gastos los debe decidir el usuario y no los bancos o comercios con sus promociones.
De esta manera, se evitará contraer deudas que luego no van a poder pagarse y saldrán muchas más caras que el descuento que se quiso aprovechar.
. Abonar el pago mínimo al final del mes: este es uno de los errores mas caros que cometen quienes usan tarjetas de credito. Esta práctica es la responsable de que muchas personas terminen con deudas varias veces superiores a lo que compraron y, muchas veces, impagables.
Al pagar sólo el monto mínimo del resumen, el resto se convierte en una deuda que genera intereses desde el momento del vencimiento. Si al mes siguiente se hace lo mismo, esos intereses del primer mes se capitalizan, o sea se transforman en deuda y, junto con el saldo anterior, generan nuevos intereses para el período que sigue.
LN