San José, 13 ene (EP/PL).- Las trabajadoras domésticas constituyen hoy el grupo laboral más desprotegido de Costa Rica, pues solo el 21 por ciento de ellas está asegurada como asalariada, según revela la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho).
La más reciente Enaho, correspondiente a 2021, refleja que ocho de cada 10 de las 106 mil 330 personas que realizan los oficios hogareños en las viviendas de otras carecen del correspondiente seguro como asalariadas.
En un esfuerzo aún infructuoso por disminuir este alto porcentaje de inseguridad laboral para las empleadas domésticas, la Caja Costarricense de Seguro Social recientemente disminuirá el costo del aseguramiento de este grupo para los patronos y facilitó los trámites.
Hoy en día la CCSS cuenta con una modalidad de aseguramiento para trabajadoras domésticas que reduce hasta en un 40 por ciento el costo de aseguramiento que un patrono tiene que cubrir en aseguramientos normales, exclusivo el gerente financiero de esa entidad, Gustavo Picado.
Precisó que este seguro le permite a la trabajadora doméstica no solo tener acceso a servicios y atenciones de salud, prestaciones económicas en licencia de incapacidad o maternidad, sino también puede derivar esos beneficios a familiares.
Picado afirmó que las empleadas domésticas, al igual que el resto de los trabajadores, tienen derecho a contar con el seguro, incluso cuando labore por horas o días a la semana.
Para evadir este pago, muchos patronos contratan para esta labor a migrantes indocumentados.