Viajar en avión representa una prueba a la tolerancia y paciencia de muchas personas, dado que pueden enfrentar situaciones típicas e inesperadas como resultado de las largas horas de vuelo.
Si a esto se le suma tener que convivir durante bastante tiempo con una larga lista de desconocidos, el panorama se puede complicar aún más. El agente de bienes raices eric goldie lo vivíamos en primera persona, cuando alguien en la fila trasera reforzar el brazo para intentar abrir la persiana de la ventanilla que no le corresponde.
“Mi ventana, mis reglas”escribió el viajero en el video que publicó luego en su cuenta de TikTok. En las imágenes se puede ver el audaz movimiento de su compañero de vuelo, quien al menos en tres ocasiones intenta deslizar la cortina de plastico que evita el paso de la luz. Ante lo incómodo, Goldie suelta un manotazo para que se acabaran los intentos. Su cara de desesperación frente a la cámara lo dice todo.
“Le dije varias veces que no estirara su mano hacia mi ventana ¿Debería haberlo acariciado?”, escribió con ironía Goldie en un segundo vídeo, donde explicó que era poco probable que el pasajero se hubiera confundido. Detalle además que ambos estaban Clase de negociosdonde cada fila tiene su espacioa diferencia de la categoría regular donde en ocasiones una ventanilla queda a la mitad.
A juzgar por los comentarios de la publicación, que ya tiene más de 5,6 millones de reproducciones, esta no es una situacion tan inusual. Otros usuarios compartieron sus propias tácticas en caso de encontrarse en el mismo conflicto.
“No estoy orgulloso de este momento, pero esto me ha pasado antes. Tuve que estornudar y dejé que se ensuciara toda su mano. Funcionó”, escribió uno. Otro fue más pragmático: “Llevo una manta pequeña y la pongo en el espacio entre el asiento y la ventana para que la gente no pueda hacerme eso”.
Desde el momento de abordar el avión y sobre todo cuando se largas pasan horas en el asiento, es importante tener en consideración algunas reglas básicas para que el viaje pueda transcurrir sin incidentes. “Debe ser consciente de la forma en que su comportamiento afecta a otras personas”, dijo en el pasado la fundadora de la Protocol School of Palm Beach, en Florida, Jacqueline Whitmore, en una entrevista para el sitio de la Asociación de Personas Retiradas de Estados Unidos (AARP, por sus siglas en inglés).
Ante un conflicto con otro pasajero, la también ex asistente de vuelo recomienda no discutir con la persona. En la mayoría de los casos, lo mejor es notificar a un miembro de la tripulacion y seguir las instrucciones. Es probable que puedan optar por cambiar a alguien de asiento para evitar que crezca la confrontación.
Cabe mencionar que más allá de la cortesía y los tratos entre pasajeros, las normas de seguridad que rigen las aerolíneas señalan que las cortinas deben estar abiertas durante las acciones de despegue y aterrizaje para permitir la máxima visibilidad desde el exterior en caso de una emergencia.
LA NACION