Parte 1 de 6
Las finanzas personales son un conjunto de herramientas que nos ayudan a manejar mejor nuestra relación con el dinero. Nos enseñan por ejemplo a cuidarlo y utilizarlo con inteligencia, construir un patrimonio y protegerlo. En algunos casos también a corregir el rumbo: por ejemplo la manera más eficiente de salir de deudas.
Como mencionó en muchas ocasiones, el dinero nunca es un fin en sí mismo. Es sólo un medio que nos ayuda a lograr ciertas cosas que son importantes para nosotros y que cuestan dinero. En ese sentido, son una parte integral de nuestro plan de vida.
Por eso, desde mi punto de vista, las finanzas personales se sostienen en cuatro pilares de los que él habló antes, pero que hoy quiero revisitar:
1.Tener claras nuestras prioridades (establecer metas y objetivos). Esto es un punto medular. Si no sabemos a dónde queremos llegar, emprenderemos un viaje sin rumbo.
2.Tomar control de nuestro dinero, lo cual implica también separar una parte para lograr esas metas que son importantes para nosotros (ahorrar). Hay una frase que me gusta mucho y que lo dice todo: si no aprendes a tomar control de tu dinero, el dinero tomará control de ti.
3.La construcción del patrimonio, para lo cual es importante aprender a invertir con inteligencia, en congruencia con nuestros objetivos, poniendo énfasis en aquellos de mayor plazo.
4. La protección del patrimonio, que es algo de lo que se habla poco, particularmente en un país como México donde hace tanta falta de cultura de previsión. Nos gusta o no, las cosas suceden y si no cuidamos este aspecto, podemos perderlo todo de la noche a la mañana.
Mucha gente me dirá que hay otros aspectos igualmente importantes. Por ejemplo, una buena estrategia fiscal, porque existen estímulos que vale la pena aprovechar. En México se puede deducir, bajo ciertos límites y condiciones, el ahorro para el retiro y la prima de los seguros de gastos médicos mayores. Además los seguros de vida que tienen un componente de ahorro garantizado (o de inversión no garantizada) pueden tener también algunos beneficios fiscales.
Todo esto es cierto y por eso pienso que cualquier plan financiero debe tener una visión holística e integral. Son aspectos que se deben estudiar como parte de una estrategia de construcción y protección del patrimonio.
Otra parte esencial de las finanzas personales es el manejo de los créditos y de las deudas. Eso incluye estrategias para salir de ellas. Desde mi punto de vista, esto es parte integral de los dos primeros pilares: nuestros objetivos financieros y el manejo de nuestro dinero.
Por ejemplo, si una persona tiene deudas, una de sus prioridades, antes de pensar en otras cosas, debe ser salir de ellas. Al pagarlas, estamos liberando flujo de efectivo que podemos entonces utilizar para otros objetivos.
Así, cualquier plan financiero debe estar basado en estos cuatro pilares. Debemos tener cierto dónde partimos ya dónde queremos llegar en nuestra vida (metas y objetivos). Entonces podemos manejar nuestro dinero de tal forma que una parte de lo que ganamos, sea para construir eso que queremos lograr. Para ello, debemos invertir con inteligencia y con disciplina. Además, debemos proteger lo que estamos construyendo, comenzando por nuestra propia capacidad de generar ingresos.
En esta serie de colaboraciones hablaré detalladamente de cada uno de estos que son, a mi juicio, los cuatro pilares de las finanzas personales.