González afirmó que la sustentación técnica del proyecto se hizo en debida forma a la junta directiva, incluyendo el análisis de factibilidad
La Caja de Seguro Social (CSS) se prepara con los pliegos de condiciones para licitar 44 plantas para elaborar oxígeno hospitalario, que serán instaladas en 11 de sus principales unidades médicas, entre ellas la Ciudad de la Salud y el Complejo Hospitalario Metropolitano.
El proceso se da luego de que la mayoría de los 11 miembros de la junta directiva de la entidad avalara este proyecto. De ellos, 8 dieron su voto afirmativo, 2 votaron en contra y 1 se abstuvo: la propia presidenta de la junta directiva de la CSS, Aida Maduro.
Maduro ha indicado que no pudo votar a favor de esta iniciativa porque los funcionarios de la CSS no pueden explicar, detalladamente, cómo se llegaría al ahorro financiero a través de los años con la implementación de este proyecto.
No obstante, Alex González, director ejecutivo nacional de Servicios y Prestaciones en Salud de la CSS, defiende el proyecto, lo justifica y señala que se generarán ahorros millonarios para la institución, situación que, asegura, forma parte de los planes de la entidad de modernizarse y ser autosuficientes en la adquisicion de algunos medicamentos e insumos.
“La empresa que ganó la licitación le dará el mantenimiento preventivo y correctivo a las plantas, y hará por cinco años las transferencias de competencias al personal de la CSS”
También asegura que la sustentación técnica del proyecto se hizo en debida forma ante la junta directiva, incluyendo el análisis de factibilidad.
¿Por qué surge este proyecto?
Esto forma parte de un plan de modernización en donde la Caja no solo está viendo el tema del oxígeno, sino también, con la habilitación de la Ciudad de la Salud, se le va a permitir a la entidad la no externalización de algunos servicios, ya que estas instalaciones se realizarán en estas nuevas y modernas médicas. Además, en esta pandemia de covid-19 el oxígeno se convirtió en el medicamento más importante, lo que duplicó la necesidad de oxígeno y luego se cuadruplicó. Desde estas plantas podemos obtener oxígeno para suministrarles a las unidades periféricas, como las policlínicas y las unidades locales de atención primaria de salud (Ulaps) que utilizan oxígeno en tanques. Esto bajo todo punto de vista hace que la CSS sea autosostenible y no tenga que comprar externamente algo que es tan importante para nosotros.
¿Cuánto le cuesta a la CSS adquirir el oxígeno hospitalario anualmente?
La Caja pasó de pagar entre $3 millones y $4 millones en 2017, y el año pasado la entidad tuvo que presupuestar alrededor de $18 millones. Eso pasó porque debido a la pandemia aumentó la demanda por la cantidad de pacientes que requerían más este medicamento. Actualmente la Caja compra este medicamento a una sola empresa a un precio de $5,03 el metro cúbico y consume 3 millones de metros cúbicos de oxígeno por año.
¿Se produciría algún ahorro económico para la entidad?
El proyecto tiene un costo de $101,2 millones, pero se desembolsarán poco a poco con cada presupuesto para pagar las plantas, mantener la operación y lograr que la empresa siga ofreciendo el mantenimiento preventivo y correctivo. También darán por cinco años las transferencias de competencias y capacitación al personal de la CSS para que la entidad tenga la capacidad de administrar sus propias plantas. Una vez que la empresa termina los cinco años, la CSS solo tiene que pagar el mantenimiento, lo que significa $5 millones anuales por todas las plantas. Eso quiere decir que estaríamos produciendo un oxígeno que, según los análisis realizados, dividiendo el costo de mantenimiento y la producción estimada, a esa fecha, la CSS podría estar pagando 85 centavos por metro cúbico. Eso es muchísimo más barato que los $5,03 por metro cúbico que paga la CSS actualmente. Habría ahorros importantes.
¿Cuál es el sistema operativo de estas plantas y quién las administrará?
Las plantas que estamos proponiendo funcionan con un sistema de condensación de gases. El oxigeno se toma del ambiente. Se instalarían cuatro plantas en cada una de las 11 unidades hospitalarias. Eso va a permitir una producción redundante, en donde tres plantas siempre están funcionando y la cuarta se activa cada 72 horas para tener un respaldo. Se van alternando mientras van produciendo oxígeno. En total serán 44 plantas, es decir 4 por cada unidad. La CSS no va a instalar ni administrar las plantas, sino que se hará la licitación pública para que cualquier empresa que tenga la capacidad de instalarlas va a producir oxígeno al 99% para los pacientes, va a acompañar durante cinco años a la entidad, y luego, la CSS asumirá las competencias de ellas.
¿Cómo va este proceso de licitación?
Ya la junta directiva presentó el gasto, entonces se ha procedido a elaborar el pliego de condiciones para la licitación que está en fase de estructuración y una vez que se tenga listo se dar la publicación en el portal de Panamá Compras para hacer la licitación abierta y garantizar una mayor participación de los proponentes. Eso lleva un contenido donde se esclarece todo lo que son especificaciones técnicas. En una o dos semanas debemos estar listos para llevar a cabo la licitación a cabo.
¿Para cuando deben estar instaladas estas plantas?
Una vez que la licitación sea adjudicada, la CSS estaría en la posibilidad de garantizar que la empresa ganadora iniciara una vez el proceso de instalación. A finales de 2022 podremos estar en capacidad de adjudicar el proyecto para empezar a instalarlas y producir oxígeno en 2023.
No es un proyecto improvisado entonces…
A todas luces es un hermoso proyecto, porque ya vimos en la pandemia que el oxígeno se convirtió en el medicamento más importante para atender a los pacientes. Siendo así, pienso que es bueno que la CSS deba ser autosuficiente, porque si se diera otra pandemia u otra crisis, imagínese depender de una empresa para que la institución pueda tener oxígeno. Además, la empresa obviamente le da a la Caja un precio de mercado que es mucho más caro que el que sería si la entidad propia lo produce. No se trata simplemente de tomar una decisión de forma arbitraria, es una decisión para lograr que la CSS se modernice con una estrategia de producir nuestro propio oxígeno. Eso ocurre en varios países del mundo desde hace más de 20 años y eso va a poner a la Caja en una mejor posición.