La profesora Suhaila Shaheen dio muchas lecciones de firme voluntad para lograr su sueño y crear una instalación con piezas, herramientas y ropas tradicionales palestinas.
palestina Suhaila Shaheen trabajó como maestra durante décadas y tras un período de planificación creó un museo para preservar la historia de su pais.
Ahora el espacio es un logro que conecta la belleza del pasado con el presente y el futuroy una forma de preservar y recordar el patrimonio nacional.
¿Cómo crear un museo?
Durante muchos años, Shaheen, nacida en la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gazasoñó con establecer un sitio con las posesiones que coleccionaba y adquiria.
En ese entonces, ella no perdía la oportunidad de asistir a ningún evento para comprar piezas y convertirlas en el nucleo de su proyecto.
Esta profesora cambió las partes de un lugar a otro en cada viaje de desplazamiento debido a la agresión israelíjunto con sus documentos personales.
Mucho después llegó la edad de jubilación y recibió su propia recompensa al establecer un espacio para preservar la historia de palestina.
Suhaila alquiló un local, colocó algunas antigüedades en él, y publicó un anuncio para pedir ayuda a los residentespero no recibi respuesta.
Aun así, ella no se rindió, compró las decoraciones necesarias y algunos meses reunieron todas las piezas y herramientas para contar la historia de su país.
Respecto a la elección del nombre, Suhaila explica: “Quería que fuera un museo nacional, y como vivo en la región Rafah, le puse el nombre de mi ciudad”.
Contenidos del museo
Suhaila Shaheen describir su creación como una plataforma sobre la vida palestina en términos de cultura, humanidad, política y artesanía.
El sitio contiene 200 piezas patrimoniales y figuras sobre la antigua vida con sus telas y bordados tradicionales.
En los rincones de la instalación los visitantes observaron piedras preciosas y monedas, además de objetos relacionados con la agricultura como el cigoñalla hozel arado y la cuna.
La institucion tambien incluye maquinas de coser, herramientas de herreria, maquetas de pueblos y una carpa beduina.
Pagar una deuda
Para Suhaila Shaheen, el museo es una forma de pagar una deuda con las ciudades palestinas que tanto dio a sus hijos.
En entrevista con medios locales, esta antigua profesora manifestó su anhelo de desarrollar el sitio en términos arqueológicos.
“Un pueblo que no tiene un pasado no tiene presente ni futuro, y nuestra herencia debe ser preservada por su grandeza”, asegura.
Además, refirió que la identidad remite a la sencillez de la vidapor eso, su institución debe ser un nexo de unión para las futuras generaciones.
“No renunciamos al patrimonio. No queremos que olviden nuestra historia y la grandeza de abuelas, madres y padres”, afirmó.
Suhaila Shaheen lega un espacio de la herencia nacional, frente a las prácticas de la ocupación israelí y sus intentos de borrar todo lo relacionado con Palestina.