Un periodista con acceso a los círculos de poder de Estados Unidos narró que el expresidente George W. Bush, ansioso, consumía caramelos cuando analizaba, junto a sus asesores, los descalabros de la política exterior de su administración.
Si esa forma de espantar la angustia hubiera sido común en todos los que ocuparon el mismo sillón imperial en el periodo que se extiende desde el 1ro. de enero de 1959 hasta la fecha, seguramente los responsables de los servicios de la Casa Blanca hubieran tenido que agregar una cifra abultada por compras de confituras a los millones gastados en actos subversivos y agresiones de todo tipo contra la Revolución cubana.
Ni durante los días de mayor azote de la COVID-19 aflojaron una sola de las pérfidas medidas con que tratan de ahogarnos. Sin embargo, Cuba movilizó todos sus recursos y creó las vacunas que salvaron la nación, la llevaron a la normalidad y dieron pie a la recuperación en marcha.
No hay duda de que las desventuras de los adversarios tienen que ver, hay, con la capacidad de los dirigentes cubanos para identificar y enfrentar los desafíos con la participación popular.
LO QUE NECESITA 2023
Tampoco será fácil a lo largo de este año. Sobre Cuba gravita la severa inflación económica mundial que agrava todo lo que se debe comprar en el exterior. Por eso es vital el incremento de las exportaciones, lo que requiere llegar, como mínimo, a 9 755 millones de dólares, un incremento de 1 037 millones con relación al estimado de 2022, según hizo público recientemente, ante los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular, Alejandro Gil, ministro de Economía y Planificación.
Y en ese esfuerzo, se sabe, hay que elevar la presencia de los productos tradicionales y aportar nuevos rubros, a partir de las potencialidades de los territorios. También hay que pueden aprovechar las exportaciones de bienes, que aportar un poco más de 2 600 millones de dólares, y por servicios turísticos, que arrojarán, según los cálculos, algo más de 1 600 millones de la misma moneda, significativando incrementos con respecto a 2022.
Resulta comprensible la necesidad del crecimiento de los ingresos en divisas, que, junto al aumento de las ofertas, el control del déficit presupuestario y la disminución de gastos en algunos sectores, forma parte del diseño de enfrentamiento a la inflación interna, que ha afectado la capacidad de compra del salario y las pensiones.
En ese contexto se destinarán 1 648 millones de dólares a la importación de alimentos para respaldar la canasta familiar normada y el consumo social.
Sobre la base de los mil millones de dólares más de ingresos con respecto al estimado de 2022, ya partir de los efectos de las 63 medidas adoptadas con el fin de beneficiario al sector agropecuario, para este también se diseña el crecimiento de producciones.
Para la misma rama también hay inversiones sustanciales, lo que se manifiesta hoy en los más de 11 000 millones de pesos destinados a elevar las capacidades en los programas de arroz, granos, cultivos varios y ganadero, entre otros.
Otros proyectos inversionistas tienen como fin la producción de cemento, lo que se concretará en la fábrica de Nuevitas, así como de acero, enfocada en la conclusión de la modernización de Antillana de Acero.
Asimismo, se destinará dinero para terminar algo más de 30 000 viviendas por la vía estatal, y mediante esfuerzos propios, sin abandonar la posibilidad de crear células básicas habitacionales.
DE AUTONOMÍAS Y DE LA ZAFRA
La empresa socialista estatal no cumple aún el rol de dinamizar la economía del país y ser su principal fuerza motriz. Para cambiar la situación, se ha de avanzar en transformaciones de mayor envergadura, lo que implica llegar a su diferenciación, porque no todas requieren del mismo sistema de gestión e incentivos.
Entre otras cosas, para ese sector todavía son tareas pendientes el logro de la autonomía concedida y la eliminación de los mecanismos administrativos para la exhibición de recursos, a lo que se incorpora la complementariedad con los nuevos actores económicos.
En varias empresas sigue distorsionado el concepto de obtener ganancias, que debe ser sobre la base de producciones reales, con fichas de costos bien confeccionadas, y no resultado del incremento de los precios, con lo que, además, introducen más dinero en circulación y favorecen la inflación.
Será este 2023 un escenario para proseguir haciendo realidad la autonomía municipal, respaldada constitucionalmente. Es un cambio sustancial, con el que el municipio avanzará en la medida en que diagnostique con exactitud su potencial económico y lo administre en función de generar riquezas para el desarrollo propio. En fin, el reto a ese nivel es visualizar los ingresos a partir de una estrategia de desarrollo integral en la cual cuentan todos los actores económicos.
En el sector azucarero se hace todo lo posible por el avance de las medidas adoptadas para salvarlo. Pero falta un buen trecho para lograr el completamiento de la fuerza de trabajo, la creación de condiciones para organizar los colectivos y la definición de la disciplina laboral y tecnológica.
La producción de azúcar en esta zafra tiene por escenario solo un grupo de centrales. Así es más objetiva, flexible y con buenas prácticas. Está acompañado por la recuperación de la producción de derivados de la caña, como el alcohol y las mieles, que a su vez se emplean para elaborar rones de calidad y alimento animal que generan ingresos para pagar a los trabajadores propios ya los productores de caña.
JUSTICIA SOCIAL
No se descuide la Seguridad Social. En el presupuesto del año se han proyectado 45 896 millones de pesos, con los que se respaldan las prestaciones de 1 821 000 jubilados y pensionados. Asimismo, hay dinero para la entrega de subsidios destinados a la compra de materiales de construcción y edificación de células básicas a las personas con ingresos insuficientes; la atención a los problemas habitacionales de madres con más de tres hijos que lo necesitan, y la transformación de comunidades y barrios, todo bajo el enfoque de eliminar las vulnerabilidades.
A la vez se dispondrá de 39 772 millones de pesos para continuar subsidiando, entre otras prioridades, los medicamentos, las tarifas eléctricas y de gas licuado, agua, y la transportación de pasajeros. No suprime esto las intenciones de eliminar, gradualmente, los subsidios a los productos y en su lugar subsidiar a las personas.
De igual modo, el concepto asistencialista debe cambiar el enfoque, de forma tal que a las personas en condiciones de vulnerabilidad, con posibilidades de trabajar, se les dé acceso al empleo, una vía con la que salen de su situación al aportar a sí mismos ya la sociedad.
EL SEN SEGUIRÁ ENTRE LAS PRIORIDADES
Proseguirá este año la recuperación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), lo cual incluye acciones para restaurar la disponibilidad de la generación distribuida y rescatar los motores de Mariel y Moa.
El Ministerio de Energía y Minas también se ha propuesto ejecutar hasta 2024, como mínimo, dos mantenimientos de capital por año en las termoeléctricas, y pasar a tres a partir de 2025. Esto último no es fácil. Como mínimo, solo para mantenimiento, el SEN requiere cada año 250 millones de dólares
A la par deben implementarse medidas para reducir la demanda y el consumo de electricidad en todos los sectores; se incrementarán los precios de compra, por las empresas del sistema, de la electricidad por terceros. Asimismo, se otorgarán beneficios fiscales al sector estatal ya las nuevas formas de gestión no estatal para que desarrollen proyectos a partir del aprovechamiento de las fuentes renovables de energía.
Hay capacidad de respuesta frente a la guerra no convencional que nos han hecho promover situaciones de supuesta ingobernabilidad, desconfianza en el sistema y la generación de una matriz de Estado fallido.
En cuanto a las ilegalidades, los delitos y la corrupción, ni chupar caramelos quitará la ansiedad a las personas que los protagonizan. Miguel Díaz-Canel, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, ha dicho que ya quedó atrás la etapa de diagnóstico prolongado y la contemplación de esos flagelos, y se pasa al combate sistemático, eficiente, eficaz, realista y objetivo con la participación de todos.