cristina cebrian
En pleno escenario de fallas, huelgas y encierros en atencion primaria (AP), la mejor medico de familia del mundola Dra. Verónica Casado, destaca la jubilación de muchos médicos como uno de los principales desafíos que enfrenta la AP en España. En una entrevista con iSanidadla exconsejera de Sanidad de Castilla y León y médico de AP en el centro de salud de Parquesol (Valladolid), reconoce que la situación actual es “dura dura” ya que, en muchas comunidades autónomas, cerca del 50% de los médicos está (o estará) en proceso de jubilarse, por lo que peligra la reposición de profesionales. Como solución, la Dra. Casado propone equilibrar el número de plazas MIR que se ofrezcan para esta especialidad y establezcan una financiación adecuada que permita reorganizar los recursos humanos.
¿Cuál es la situación real de la atención primaria a día de hoy en toda España?
La situacion real de la atencion primaria a dia de hoy es dura, ya que esta llena de amenazas y debilidades. Esto me da pena porque la fortaleza de la AP está demostrada desde hace muchísimos años. De hecho, hay muchos estudios desde la década de los 90 en los que se empezó a demostrar que, cuantos más médicos de familia haya, menos mortalidad habrá.
La presión es tan grande que tiene que tratar a los pacientes por rebosamiento y se rompe durante el valor fundamental del médico de familia que es tener un seguimiento de los pacientes 30 años o más
Además, los países que tienen una medicina de familia bien organizada presentan un mejor nivel de salud, menos hospitalizaciones necesarias y se da una mayor esperanza de vida a pacientes crónicos que están coordinados por un médico de familia que integra diagnósticos y tratamientos. Además, según una investigación realizada en 2015 sobre la situación de la AP en Europa se demostró que la AP en España se encontró entre las tres mejores.
Es decir, utilizar una fortaleza absolutamente magnífica que depende de tres características: accesibilidad, longitudinalidad y globalidad. Ahora, las tres están rotas. No hay accesibilidad, porque faltan profesionales y, por tanto, hay listas de espera; no hay longitudinalidad, porque la presión es tan grande que tiene que tratar a los pacientes por rebosamiento y se rompe el valor fundamental del médico de familia que es tener un seguimiento de los pacientes durante 30 años o más. Si todo esto se rompe, también lo hace la atención primaria. Todo ello va a provocar un impacto sobre los niveles de morbimortalidad evitables y que será imputable a la AP.
Ante una situación tan compleja, ¿qué medidas deben tomarse para mejorar la AP en España?
Ahora mismo hay que tomar las medidas oportunas para afrontar las debilidades que tiene el sistema y afrontar sus amenazas. Hay que establecer muchas medidas y hacerlo al mismo tiempo. Por poner un ejemplo, es como si existiera un barco lleno de fisuras en el casco y tapamos solo una de ellas. Entonces, debe establecerse una estrategia para re dinamizar de nuevo la AP, teniendo en cuenta que la planificación de recursos humanos es el principal problema que hay. Por tanto, si sabemos que hay 18 especialidades, habrá que sacar las plazas suficientes dentro del sistema MIR para que, al menos dentro de cuatro años, podamos contar con estos profesionales.
Uno de los problemas que existen en muchas comunidades autónomas es que el 50% de la plantilla de médicos de AP se encuentra en una situación de jubilación
Además, uno de los problemas que existen en muchas comunidades autónomas es que el 50% de la plantilla se encuentra en una situación de jubilación. Así que, o nos ponemos las pilas rápidamente o no tendremos una reposición suficiente de profesionales. Por tanto, lo primero que hay que hacer es planificar adecuadamente las plazas de AP en las convocatorias del MIR. Después, hay que contar con una buena financiación para los recursos humanos.
¿Considera que la financiación que se destina a este nivel asistencial es adecuada?
No. De hecho, hay que financiar mejor el sistema sanitario y la atención primaria. Si queremos tener un sistema sanitario público muy potente y resolutivo, con una base que vaya desde la promoción, prevención y cuidado de las personas hasta las terapias más destacadas, hay que contar con una buena financiación.
Si queremos tener un sistema sanitario público muy potente y resolutivo hay que contar con una buena financiación en atención primaria
Dentro de esa financiación, hay que contar con los recursos humanos. En este sentido, una de las debilidades más importantes que hemos tenido es la planificación de los recursos humanos. Desde 2007 ya existían datos sobre esto y no se han tomado las medidas necesarias, por lo que ahora tenemos un problema importante de déficit de profesionales.
El tiempo que dedican los médicos de AP a las tareas administrativas suele ser elevado, ¿cómo podría reducirse para favorecer la atención a los pacientes?
El 50% del trabajo que hacemos es un trabajo burocrático. Es decir, hay tareas burocráticas que tenemos que hacer porque son importantes y hay otras que no pintan nada en nuestra consulta, como la realización de informes. Esto pudo realizarlo quienes mejor saben hacerlo, que son los administrativos sanitarios. Ellos son los que, de alguna manera, tienen que resolver estos asuntos y así nosotros los sacamos de la consulta.
¿Qué beneficios tiene para el sistema el trabajo multidisciplinario entre los médicos de AP y otros profesionales sanitarios, como enfermeros y farmacéuticos?
El área de la enfermería es muy potente y ahora también tenemos especialistas en enfermería familiar y comunitaria. Aunque, curiosamente, no les damos trabajo y terminan trabajando en los hospitales. Y al final tenemos a las enfermeras hospitalarias trabajando con nosotros en AP ya las enfermeras formadas para estar en los centros de salud, en los hospitales. Esto hay que reorganizarlo.
En un país como el nuestro, en el que hay mucha población anciana, no solo hay que curar sino también cuidar. En este sentido, el papel de la enfermería es fundamental
Por otro lado, al dedicarnos a la parte clínica ya las tareas burocráticas, hemos dejado de lado aspectos tan importantes como la salud comunitaria. Esto es, realizar intervenciones comunitarias, conocer qué le ocurre a tu población y desarrollar actividades de promoción y prevención de la salud. Todo esto es fundamental para mejorar la salud de la población y hay que volver a ponerlo sobre la mesa y contar con equipos multidisciplinares en AP.
Este sábado se celebra una nueva convocatoria del examen MIR, ¿qué mensaje puede dar a aquellos médicos jóvenes que dudan si elegir la especialidad de Medicina de Familia?
En primer lugar, hay que tener en cuenta que las plazas vacantes que suelen quedar se deben una mala planificación. De las aproximadamente 8.000 plazas que se ofrecen, muchas son más atractivas para los aspirantes porque se gana más o por la forma de trabajar, pero esas plazas no las necesita el sistema sanitario. Al final, los aspirantes eligen más plazas en los hospitales y quedan vacantes las de medicina de familia.
Esta es la especialidad más bonita del mundo y no hay nada más bonito que acompañar a los pacientes durante muchos años
Yo lo que les diría es que es la especialidad más bonita del mundo. No hay nada más bonito que ser médico especialista en personas y acompañar a los pacientes durante muchos años, observando su enfoque, psicológico y social; ayudándoles en todas las etapas de su vida, diagnosticando sus enfermedades y curando sus problemas.
Muchas veces digo que un médico de familia no tendrá nunca un Premio Nobel, pero probablemente consiga evitar muchos más casos de cáncer de pulmón que cualquier otra cosa que hagamos. Quizá llama más la atención realizando un trasplante cardíaco, pero también debería llamar la atención la cantidad de personas que conseguimos que dejen de fumar, que tendrán controlado el colesterol, la diabetes, etc. Tenemos que ser capaces, entre todos, de dar valor a la atención primaria, porque el sistema sanitario necesita un equilibrio entre los médicos generalistas y los médicos especialistas.